Lo Mejor....

¿MATAR POR AMOR?

Mucho he reflexionado acerca de esta idea.

¿Es el amor lo que nos empuja a darle una muerte más digna a algunos animales?


Aunque el tema es muy subjetivo y siempre respoderá a conclusiones derivadas de cada punto de vista y sentires, creo sano externar mi opinión al respecto.

Al matar a un animal con un método más humanitario que la electrocución, los golpes, el ahogamiento o el abandono no lo hacemos por amor, sino por MIEDO.



Miedo a no poder hacer suficiente,a la saturación, a ver en un fin miserable otra batalla perdida, a no darle la oportunidad de la dignidad al animal en desamparo.


CRUDA REALIDAD

Algunos radicalistas religiosos o políticos se inmolan, no por amor a sus ideales, sino por miedo a que sus hijos no tengan una vida más acorde a éstos en el futuro. Se matan por miedo a no lograr el cambio, no por amor a sus hijos, pues al incendiarse o atarse una bomba al cuerpo quitan al hijo la posibilidad de continuar externándose ese amor.


El hacernos creer que matamos a los animales en desamparo y con la guerra perdida por amor es un paliativo emocional de la acción, la cual, por el ángulo que se vea, es atroz. Nos daña y nos deja una amargura perenne, que deja caer resíduos tóxicos y amargos en nuestro sueño y en nuestra alma.

No conozco un solo protector o protectora que no sufra, aún después de muchos años, al primer perro que le tocó matar. No hay uno solo de ellos que no deje su marca en el espíritu.

Es el miedo el que nos hace cometer estos actos de barbarie.No es justo acusar al amor como generador de muerte.

Muchos de ustedes me conocen bien y sabrán quizá lo extremadamente excéptica que puedo llegar a ser. Sin embargo, para acompañar esta reflexión cito un pasaje bíblico: Aquel en el que, en una querella en la que se intentaba descubrir quien era la verdadera madre de un niño, el rey Salomón, decidió que le dieran una mitad de niño a cada mujer que lo exigía como suyo. La verdadera madre renunció a él, antes que verlo muerto. Esto nos enseña que el amor no mata.

APROVECHAMIENTO DE RECURSOS


Sugiero que la misma fuerza que usamos para matar a un animal y soportar lo hecho, la guardemos para exigir al estado instaurar programas serios e intitucionales de esterilización en todo el país, en lugar de minar nuestro espíritu a fuerza yendo a matar humanitariamente a los antirrábicos.


En lugar de usar esos recursos monetarios para ir a la terapia con el psicólogo para poder vivir con nuestras culpas y manejarlas, en vez de agarrar el corazón y estrujarlo en las noches para exprimir de él el dolor de los recuerdos y borrar esas miradas...usemos esa fuerza interior para alzar la voz fuerte, firme y convencida, y topar con la pared de la política, hasta sangrar la frente, hasta romper los muros y cambiar todo lo que haya que cambiar.

Claro que, mientras esto se logra, quienes estén de acuerdo en hacerlo, tendrán que seguir matando perros y gatos de manera humanitaria.Pues el volúmen de los animales en contínuo riesgo de ser vejados, humillados y torturados, es exhorbitante. Pero, por favor, creo que no es exacto, ni verdadero, ni cierto, auto convencerse que lo hacemos por AMOR, hacerlo es una manera de enjuagar la culpa.

Llamemos las cosas por su nombre, lo hacemos por MIEDO.

BUENOS TÉRMINOS

Es más, también hemos tenido un histórico miedo a los términos, como lo dice Antemio Maya. Es por eso que a veces sus exposiciones son tan sobrecogedoras: Porque nombra los hechos con las palabras adecuadas.


El término Eutanasia corresponde a terminar con una vida, retirándole la asistencia artificial, cuando ésta se encuentra en procesos, valga la redundancia, terminales. Se ejerce cuando el afectado está con dolor y sin posibilidades de revertir el proceso mortal. Así que no podemos aplicarlo a animales que no pueden ser rescatados de las fauces de los centros de exterminio ¨antirrábicos¨ o de ¨control canino¨, pues en la mayoría de los casos son ejemplares saludables y con sociabilización, quienes no sufren dolores, enfermedades terminales, portadores de epidemias o patrones conductuales socialmente inaceptables o peligrosos.

¨Dormir¨es un término absurdo para aplicar en caso de matar animales saludables. Se usa cuando queremos ser poetas e imaginar que lo que estamos provocando es un descanso justo.Una vez más, un mecanismo de defensa para no sentirnos tan miserables.

PRIMERA Y ÚLTIMA

Una vez en mi vida presencié y di mi venia para matar a un perro. Era mi perro Lucky, un San Bernardo de 8 años. El cáncer en los huesos lo estaba torturando.Mucho tiempo duró su guerra, lo sobrevivió con gran entereza, y morfina, hasta que los huesos se le empezaron a romper cada vez que se movía. Vivía en un aullido. Lo matamos porque temíamos al dolor de ver su cuerpo en pedazos, su dolor físico y el dolor de nuestra familia. Yo tenía entonces doce años, sentí mucho miedo....

Más de veinte años después con la historia y los ojos más abiertos, veo más claro que aquiello no fué un acto de amor.

Para mi, y tal vez para la mayoría, la vida es un viaje lleno de incertidumbre en cuanto a la vida misma. Nuestras ideas primigenias y sus objetivos muchas veces se cubren de sombras, nuestros horizontes con frecuencia se nublan. Aún así siempre debemos esforzarnos por obtener de cada experiencia, lo mejor.Y lo mejor, es la verdad.

Charles Dickens, en las palabras del Fantasma de la Navidad Pasada y refiriéndose a cómo decidir (en vida humana) quien debe morir y quien debe vivir, escribió:

(perdonen que lo ponga en inglés, pero es que la traducción le resta virtudes)

¨Man¨ said de Ghost, ¨If man you be in heart, not adamant, forbear that wicked cant until you have discovered What the surplus is, and Where it is. Will you decide what men shall live, and what men shall die?. It may be, than in the sight of heaven, you are more worthless and less fit to live than millions like this poor´s man child. Oh God! To hear the insect on the leaf pronouncing on the too much life among his hungry brothers on the dust.¨

No tengo más que agregar a Dickens, por supuesto.
Sólamente les recomiendo leer un libro en inglés llamado ¨Dominion¨ de Mathew Scully. Una fuerte y confrontante guía de reflexiones acerca de nuestros tratos con los animales.

10 comentarios:

Josepho dijo...

Concuerdo con lo que comenta, fui incapaz< de matar un perro que rescaté de la calle, era imposible, parecía que me hablaba y me adoraba, yo era su salvadora. Pero quisiera preguntarle, en caso de gatos ferales, ¿qué se hace? ¿es válido esterilizarlos y permitirles seguir viviendo en libertad completa? Me angustia no saber nunca qué fue de ellos.

Dalia dijo...

También a mi me interesaría conocer su opinión sobre si es válido dejar en libertad a un gato poco socializado que se ha rescatado y tiene pocas posibilidades de adopción. Esterilizándolo primero.

Dalia

Grupo Perro de Familia dijo...

Estimados José y Dalia:

A pesar de que son muchos los peligros y bajezas que pueden sufrir los animales en libertad de nuestras ciudades,en ocasiones hay ejemplares cuya alternativa es, precísamente, regresar al ámbito feral,después de eterilizados, pues su experiencia evolutiva concede las condiciones para ello.

En estos casos la gran mayoría de los gatos son capaces de proveerse el sustento, guarecerse de los elementos y mantenerse seguros en grupos, prácticamente si intervención directa de los humanos.

Ello les salva la vida, más interfiere en las condiciones de salubridad y riesgos de zoonosis en los espacios de coincidencia con los humanos y éso es un terrible y gravísimo problema.

En algunos países, ¨siembran¨ escarabajos del estiércol que biodegradan las heces de los animales ferales en las áreas en las que estos habitan...pero acá estamos a años luz de que esto suceda o de que la gente , al ver una deposición animal en su camino, la levante y deposite en un contenedor destinado a ello, aun cuando no sea de su mascota.

EL GATO FERAL
La relación de nosotros, para con estos grupos de felinos, es la de proveedores anónimos e involuntarios, ya que los animales aprenden a aprovechar los objetos y alimentos que desechamos, o bien se buscan ellos mismos todos los satisfactores.

Por supuesto que todo depende de cada ejemplar. Como dice Dalia, hay gatos que, sin un concienzudo tratamiento y terapia etológica, será imposible incluirlos en un hogar con humanos, debido a su nula sociabilización y reacciones aprendidas en pro de la supervivencia en el ámbito feral.

A estos pequeños, creo y recomiendo, sí es deseable Capturarlos, Esterilizarlos y Dejarlos en libertad en su ámbito conocido.Esta es una práctica común en muchos países desarrollados. La diferencia está en que el porcentaje de maltratadores humanos en aquellos aíses es ligeramante más bajo que en latinoamérica.

Claro que vale la pena realizarlo, por la vida de todos aquellos animales que tienen la suerte de no toparse con la crueldad humana.

En resumen: Es aceptable esterilizar y dejar en libertad, pero lo más importante a realizar es una consecuente educación de nuestra sociedad para poder convivir con salud y bienestar y en equilibrio con la fauna urbana no humana.

Penélope Hoyo ECF.

Dalia dijo...

Muchas gracias por su respuesta, tengo una duda más, ¿qué sería lo válido éticamente hablando en el caso de los perros? Es un hecho que ellos son más sociales y dejarlos libres en una ciudad como la nuestra prácticamente sería condenarlos a muerte, yo no veo bien el hacinarlos en albergues, colocarlos en un hogar aunque tardado es relativamente fácil (al menos más que cuando se trata de un gato)mientras estén sanos, pero en caso de perritos enfermos o con alguna discapacidad..? Me gustaría conocer su punto de vista.

Grupo Perro de Familia dijo...

Estimada Dalia:
En el caso de los perros, especie en que soy especialista y , debo confesar, por la que siento gran afinidad y algo de debilidad,defender la vida es lo ético.

Incluso, según cada caso, es válido la práctica de esterilizarlos y devolverlos al ambito del que fueron extraídos, pues la esterilización sistemática será la única manera de terminar con el problema de la superpoblación de animales domésticos en la vía pública y sus alrededores.

Imagínate que hay una fuga de agua en tu casa. Para remediar la inundación, llamas a tus amigos y a tu familia para que te ayuden a sacar el agua del baño,algo del agua desaparace por las ventanas. Al poco tiempo, las cubetadas ya no son suficientes.

Para entonces tu y tus amigos han invertido horas útiles de trabajo en tratar de secar tu casa, sin éxito, pues ya tienes inundada toda la casa.Tus recursos fueron en vano utilizados.

¿No hubiera sido más práctico y económico llamar al plomero a arreglar la fuga? Todos hubieran ahorrado tiempo, dinero y esfuerzo.

Lo mismo sucede con el sacrificio y la esterilización.El sacrificio es ¨arreglar¨ el problema a cubetadas. Esterilizar es cerrar la llave.

CASO DE ÉXITO
Digo que , según el caso, está bien esterilizar y dejar en la misma ubicación a los perros. Hace algún tiempo se esterilizaron a los perros que vivían en un mercado de la Ciudad de México. Los comerciantes del lugar les daban de comer y algunos hasta tenían sus camitas debajo de los mostradores. Algunos puesteros acomedidos levantaban la mayor parte de las heces de los animales, otras,lo hacía el servicio de limpia de la delegación.

Estos perros habían ya formado una jauría ordenada, como bien lo saben hacer, en una espléndida sociedad jerárquica. Una vez esterilizados la reproducción se redujo a cero en la jauría, sinembargo, el instinto gremial y protección territorial se conservó,haciendo que ningún perro o perra intrusa invadiera el territorio, de manera tal que la población canina no creció en años.


Si bien es verdad que muchos perros de la calle viven experiencias de violencia y maltrato, así como las inclemencias estacionales, hay siempre una posibilidad de una vida más segura. Claro, y reitero, según el caso, el ejemplar y las condiciones etológicas circundantes.

Un perro en un ámbito inadecuado, con un carácter insociable, una enfermedad mortal que cause aullidos y desvelos por el dolor,un padecimiento terminal y zoonótico (contagioso) incurable, u fracturas múltiples, estallamiento de víceras, daño craneo-encefálico, agresividad excacerbada, violenta, incontrolable contra humanos y otros ejemplares, daño en neurotransmisores que provoquen agresión espasmódica, pueden ser causales de que un sujetosea candidato a sacrificio. De otro modo, según mi modo de ver, merece vivir.

Carlos B. dijo...

Un consternado animalista escribe :

Coincido completamente con la autora : Nadie tiene justificacion alguna de decidir si un humano o animalito vive o muere, mas que en mi muy humilde opinión, si el ser en cuestion es consciente y puede decidir sobre su futuro, con pleno conocimiento de causa

Nuestra sociedad moderna es una sociedad fallida en muchos sentidos. Este es uno de ellos donde la porqueria de seres humanos que estan en posiciones de poder en nuestros gobiernos deciden justamente el exterminio de seres hermosos como perros y gatos por millones- crimen aún más atroz por que atentamos contra seres indefensos. Que el destino les exija cuentas, esperando que el que "a hierro mate, ahierro muera"

Hasta ahora, el "pecado" descrito ha sido de acción; resta describir el de "inacción" : Siento decirlo, pero el que es pasivo ante este problema, es COMPLICE por que con su actitud y abulia condona esto.

Exhorto a la animación de espiritu y al llamado de la acción positiva en pos de detener esta barbarie y otras muchas que flagelan y empobrecen al espíritu humano

Atte

Carlos

~Angelique~ dijo...

Yo estoy del otro lado de la moneda, y lo extrapolo, relacionándolo a tu comentario respecto a que sacrificar a tu San Bernardo con cáncer óseo fuese por MIEDO. Mi padre falleció por cáncer, los últimos meses de su vida era un muerto viviente, era completamente dependiente de nosotros para todo; hacer sus necesidades, comer, beber, bañarse. Pedía la morfina y se veía que se retorcía de dolor a pesar de las dósises altisimas de sus fármacos. ¿Es eso vida? ¿Un ser vivo debe tener que aguantar eso? Un humano puede vocalizar y decirte lo que está sintiendo, ¿pero un peludo? ¿En verdad se vale someter a estos animales a tratamientos dolorosos y largos sólo para que nosotros nos sintamos mejor? Yo estoy de acuerdo con la eutanasia, y creo que utilizada responsablemente es una forma de evitarle dolor a los seres vivos. Sé que mi opinión no será popular, pero no creo que sea justo para que ellos tengan que sufrir por nuestro egoísmo.

Grupo Perro de Familia dijo...

Angelique. Cuando matamos al San Bernardo era yo una niña y , reitero, no era un sentimiento de amor el que experimentaba, sino de miedo. Creo en la eutanasia necesaria, de hecho la pediría para mi misma en su momento,verás, si te cuento, que mi cuerpo ha sufrido dolor y enfermedad con riesgo mortal en varias ocasiones y, con el favor del destino, hasta ahora he sobrevivido...en un par de esas crisis los médicos me daban por muerta..y aqui sigo. Que mi familia me desconecte si ello ya es legal y pueden con ello.Sólo que no trataré de convencer a mi familia que es un acto de amor...Para mi, es la puntilla de la impotencia y el miedo a prescenciar y deber atender más dolor y sufrimiento como bien lo describes.
Uno debe terminar con la vida de un animal que no tiene posibilidades de reestablecesse, sólo que , insisto, es la frustración y la impotencia lo que nos lleva a ello, es aceptar ser vencido por la enfermedad, o cual es parte de la vida....el amor es generador de otras cosas.

Brigada Patitas Vagabundas dijo...

Querida, una gran reflexión, gracias por compartirla, una vez más aprendiendo de ti. Un gran abrazo!
Sandra Ramírez

Ana del Villar dijo...

Gracias por escribir esta reflexión desde tu corazón y desde la verdad misma de nuestros actos, no desde los animales. Esta misma reflexión comparte en el origen a la raza humana, en la consideración de la vida, los niños no-nacidos, y los enfermos: no se mata por amor.